viernes, 6 de noviembre de 2015

La Verdad




Brindo por tu felicidad, por tu alegría y por la verdad... Si mi ego me llevara a no querer comprender cada cosa que sucede en nuestras vidas, sería una persona perdida en este mundo... que cada pasó lo calcularía y cuantificaría para poder tratar de sacar ventajas... y así lograr muchas cosas que están lejos de mis principios... Prefiero pasar por no entender absolutamente nada y no es que quiera ignorar... porque toda la historia está en vista... que más tarde que nunca quieras cambiar y transformarte en lo que no eres... no quiero tener esa capacidad de prejuicio o de enjuiciar, sólo quiero tratar de transformar mi admiración y lograr el entender el cómo, y no me queda más que mirar el cómo en cada oportunidad se va desvaneciendo en el tiempo, todo tu orgullo y nobleza... y que no es más que uno y otro más... Tenemos la costumbre de aferrarnos a nuestros propios, sueños y a creer en nuestras propias historias, como también a no ver más allá de lo que queremos ver, tal vez por miedo a enfrentarnos a la realidad y nos aferramos a eso. Hay que tener mucha voluntad para enfrentar aunque no queramos, porque siempre es por nuestro bien... nada en esta vida pasa por sólo si y la mejor arma es preguntarse para que... para qué resistirse, para que continuar con ilusiones que sólo serán no más que eso. Idealizar y las fantasías son sólo eso... como los sueños que cuando despiertas se acaban, o como cuando te duele algo tomas el remedio exacto, preciso y pasa... Siempre hay un mañana mejor... Dios se encarga de que cuando actúas bien no te suelta la mano y puedes seguir adelante luchando, entregándote la fortaleza para enfrentar cada día con el mejor de los optimismo. No existen las personas ideales, somos personas que cometemos muchísimos errores y mientras no sea con intención, tienes la oportunidad de
corregir, de ser mejor y tener la tranquilidad de que aprendes, puedes entender y aceptar, y ser mejor persona. Es el tiempo el que siempre muestra la verdad y que se encarga de aferrarte más a tus principios a la honestidad y la sencillez, comienzas a quererte a aceptarte tal cual, a sentir orgullo de cómo eres... que estas capacitado y maduro para ser real, a entregar lo mejor... y que te hace sentirte de que eres especial... que eres verdadero, esperanzado en un mejor mañana... respetar para ser respetado, y que puedes ser cuidadoso con lo que prometes, y a cumplir.. y que puedes dejar llevar por tú corazón… La enseñanzas de la vida te dan la intuición de reconocer y ver un poco más allá, a sentirte querido y valorado por las personas que realmente siempre van a estar contigo, a refugiarte en ellos los cuales son los que siempre te van apreciar... con la convicción de no hacer lo que no te gusta que te hagan... porque más tarde que nunca se regresa...vinimos a esta vida a vivirla y soy enteramente responsable de decidir cuáles son mis expectativas... como también de mis actos, mis objetivo, mis sueños y mis promesas... y de quien quiero verlas cumplidas... Ya entendí... que  puedo detenerme y aceptar cada una de mis emociones porque son mías, porque hablan de mí, porque simplemente soy yo... y estoy donde Dios quiere que este.